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- 16/05/2007, 00:07 #1Miembro del foro
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Mantenimiento de baterías
Recientemente me han comentado que es bueno para las baterías de una instalación fotovoltaica aislada hacer que se descarguen totalmente dos o tres veces al año.
Yo tenía entendido que había que evitar a toda costa que las baterías se descargasen más del 70% porque eso acortaba el número de ciclos, y que, muy al contrario, lo recomendable sería cargarlas totalmente de vez en cuando (para eso se ponen los cargadores).
¿Cual es vuestra opinión?
Gracias
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- 16/05/2007, 11:45 #2
Las baterías de plomo/acido, se deben tener siempre cargadas, no se te ocurra descargarlas, este tipo de baterías sufren por sobrecargas y por descargas profundas, esto lo evita el regulador, lo mas perjudicial para una batería precisamente son las descargas profundas, a lo que se añade y suma el tiempo que esté descargada la batería. Si esta situación se alarga, llega un momento en que ya no admiten carga y la única solución (depende del tiempo que hayan estado descargadas) es cargarlas al revés, es decir cambiando la polaridad durante unos minutos y cargandolas de nuevo con la polaridad correcta y es posible que admita carga. Pero esa batería tendrá un daño grave y nunca se comportará como una nueva.
Lo de descargar las baterías de cuando en cuando, esta referido a las de niquel-cadmio y es debido a que guardan un "efecto memoria" del nivel de carga y no llegan a cargarse del todo, por eso es conveniente descargarlas completamente de vez en cuando y cargarlas de nuevo a partir de cero. Saludos
Conchuo
- 16/05/2007, 12:34 #3Miembro del foro
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Muchísimas gracias por tu respuesta conchuo. Lo has explicado perfectamente.
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Si una batería de Plomo-ácido se deja en un estado de descarga profunda durante un período prolongado de tiempo, se producirá su sulfatación. Parte del sulfuro del ácido se combinará con plomo procedente de las placas para formar sulfato de plomo. Si la batería no se rellena con agua periódicamente, parte de las placas quedarán expuestas al aire, y el proceso se verá acelerado.
El sulfato de plomo recubre las placas de forma que el electrolito no puede penetrar en ellas. Esto supone una pérdida irreversible de capacidad en la batería que, incluso con la adición de agua, no se puede recuperar.